martes, 13 de noviembre de 2012

Asturiano taura y complicao´


Si hay algo que admiro de sobremanera es a aquellas mujeres que son capaces de expresarse con la mayor de la sutilezas, que son pura sensualidad; esas que seguramente, inclusive, mientras duermen, reposan su cabeza sobre la almohada como el peso de una pluma. Creo que no es mi caso, al menos no tanto. Ja! Si bien hoy no me avergüenzo de cómo escribo, confieso que en mi adolescencia (momento álgido, repleto de adolesceres y  pruritos insólitos) me daba como cosita leerme, sentía que cada tanto se deslizaba alguna frase brutal, plena de desparpajo y cero sensualidad. Hoy probablemente mi realidad sea otra, me siento una mujer plena de sensualidad que escribe con pleno desparpajo y con  cierto camionero que lleva adentro que cada tanto pega un grito y se libera. Sólo cada tanto que quede claro! Jaja!
  Hoy pensaba que quizás esa especie de hombre peludo del bajofondo sea genético. Desde ya es un comentario, imposible subirme a la ola de un tipo que ganó un Konex. Pero a lo que iba, este hombre, que fue mi tío; Joaquín Gomez Bas, era Asturiano y sin embargo fue uno de los fundadores de la Academia de Lunfardo y parte de su obra literaria la basó en poesía lunfarda. Un asturiano que manejara de esa manera el lunfardo!!?? Ok, ya fue, definitivamente puedo escribir como escribo y ser delicada a la vez!! Seeeee….
  Por lo pronto, es una satisfacción personal poder compartir con ustedes algunas cosas de mi tío, no sólo escribió poesía lunfarda (que es de las cosas que más me gustan de él).  Les dejo un resumen de la web (más fácil y concreto):
Joaquín Gómez Bas, autor clave de la literatura argentina del siglo XX, nació en Oviedo, Asturias, España. Participó en distintos grupos literarios y así surgió su vocación de escritor y pintor. En el campo de la pintura, su primera muestra individual fue en 1958. Sus obras figuran en varios museos nacionales y provinciales y en colecciones particulares. En el ámbito de las letras fue miembro de la Academia Porteña del Lunfardo, publicó sus poemas y luego se extendió a la narrativa. Colaboró con varios periódicos y revistas del país y del extranjero. Entre sus numerosos libros se destacan "La resaca", "Oro bajo" y "La comparsa". Fue distinguido con el Premio Konex (1984) y con la medalla de oro otorgada por la Comisión Nacional de Cultura por Barrio Gris (1954). En el cine, fue guionista de las obras "Hombre de la esquina rosada" (1962), "Oro bajo" (1956), "El curandero" (1955) y "Barrio gris" (1954). Gómez Bas murió el 4 de noviembre de 1984 en Buenos Aires.
Entrega de los premios “Pedro de Mendoza”. De pie: Luis Alposta y Edmundo Rivero. Sentados: Ireneo Leguisamo, Ernesto Sabato, Sigfredo Pastor, Rosita Quiroga y Joaquín Gómez Bas

Bueno, y acá lo que me interesa, algunas de sus poesías (con ayudita incluída):

El espiro
Joaquín Gómez Bas
Mirá, negra, me pianto. Te la digo derecho,
sin palabras al bardo, de mi bronca a tu oreja.
Total, ya no hay motivo pa' pensar en la vieja;
ella se fue, y yo planto. Me pudrí en el repecho
de sudar pa' tu lujo, remando como grone,
del conchabo a la cueva, del morfi a la catrera,
rajando para el yugo con la estrella primera,
con el hambre de guita del turro que se pone.

Te alhajé y te empilchaste como para milonga
de copete oligarca. Te levanté a babucha.
Vos, jarangón corrido. Yo, quemando en la cucha
el faso del estrilo, pensando en villalonga,
en tomarme el aceite con todo, sin aviso,
sin escombro, tranquilo, demorado en el raje
para astillar recuerdos masticando el mensaje.

Fui laburante en serio por aquel compromiso
de que estaba la vieja, y ella nada sabía
de tu paso en la mala, de tu sangre falluta;
no supo de los mangos que chapaste en la ruta
de donde yo te traje. Ella nada sabía
del metejón chitrulo que me oxidó el cuchillo
y a mi cartel de taura le puso bastón blanco;
ella no supo nunca por qué a Conrado el Manco
le caía tan fiero su trago de vinillo.

Y ahora que la vieja no está -Dios la tenga-
me puedo lamber solo. Y a vos, que la garúa
te refresque el balero. Pa' mí ya no hay mamúa
mejor que esta piantada que me hago en pata renga.

Hasta más ver, che negra; perdón por el rezongo,
atenti a la estrolada... y que te aguante Mongo.

Conchabo: Trabajo
Cueva: Casa
Yugo: empleo
Jarangón: fiesta
Cucha: cama
Estrilo: Rabia
Villalonga: abandono, despedida.
Aceite: despido, expulsión.
Chitrulo: tonto.
Taura: guapo, valentón.
Estrolada: rezongo, vapuleo.

La cardíaca
Joaquín Gómez Bas
Te vi serio, diquero, con gran pinta de trompa,
atracando tu bote, pavada e'checonato.
Y yo, que te rejuno profundo hace rato,
recordé cuando usabas remendao el talompa.

Me saludaste lerdo, medio de cotelete,
vista la mishiadura patente de mi facha;
y pensé que la escuela canera de tu hilacha
te apuntaló el pelecho.
Siempre, desde purrete, recorriste baquiano
la cancha facilonga del acomodo,
siempre fuiste luz en la conga de manotear tupido,
siempre primero vos.

Minas, guita, hasta honores
¿y para qué tanta viveza?
Si mañana en la catrera,
en la calle o en la mesa,
te chapa la cardíaca... y adiós.

Checonato: automóvil, cheque.
Canera: Gente de mal vivir.
Pelecho: mejor vivir, mejoramiento económico.

Vitrolera
Joaquín Gómez Bas
La mersa te junaba desde abajo.
Tu trabajo
era un esgunfio eterno con vitrola.
Si en tu noche, tan sola,
se daba carambola,
enganchabas al punto con biyuya
que te llamaba suya
por el derecho misho de unos mangos.

Rebajé los tamangos
chamuyándote en curda por la yeca
cuando al salir del feca
ibas a apoliyar dura de frío...
Por vos anduve medio chichipío;
como un gil deshojé la margarita...
Y nada más. Para bancar tu hastío
me sobró labia y me faltó la guita.

Esgunfio: cansado, aburrido.
Biyuya: Dinero.
Tamangos: zapatos.
Chichipío: Tonto.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Share

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More